Ser Mayor y Feliz, antes de morir en el intento
La Intendencia de San José conmemorará el Mes de las Personas Mayores con actividades culturales, recreativas, de sensibilización y cuidados.
Imagen de la serie: Las chicas de oro
El programa es el siguiente:
1 de octubre – Día Internacional de las Personas Mayores
Muestra de talleres de colectivos de adultos mayores
Hora 14:00 – Peatonal Paseo de los Constituyentes de San José de Mayo
3 y 4 de octubre
Encuentro nacional de personas mayores en Maldonado
Sesión de la Comisión Interdepartamental de Personas Mayores del Congreso de Intendentes
15 de octubre
Conversatorio sobre salud mental. Inmayores-Mides
Hora 15:00 – Espacio Cultural San José
16 de octubre
Programa Cocina móvil
Hora 10:30 y 15:30 – Plaza de los Treinta y Tres de Libertad
17 de octubre
Velada artística (teatro, coros, danzas y expresión corporal)
Hora 19:00 – Teatro Macció
18 de octubre
Baile de la primavera
Hora 16:00 – Club de Abuelos de Ecilda Paullier
1 de noviembre
Encuentro familiar de envejecimiento activo
Hora 15:00 – Parque Rodó de San José
La presentación de las actividades estuvo a cargo de la directora general de Políticas Sociales de la Intendencia, Carolina Hornes y Fabián Verdino, funcionario de esa repartición.
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Lectura recomendada:
Vivimos una difícil paradoja.
El incremento de la esperanza de vida es algo que en cualquier país es una gran noticia. Sin embargo, el envejecimiento de la población, consecuencia de una mayor longevidad, es uno de los nuevos problemas de los estados industrializados. Aunque es evidente que la edad para considerar anciano a alguien ha cambiado, lo cierto es que la relación entre personas mayores y jóvenes se está desequilibrando a gran velocidad. En Japón alrededor del 27 % de su población tiene mas de 65 años.
En este horizonte, la aparición de Calidad de vida en personas adultas y mayores no puede ser más oportuna. Ángel De-Juanas Oliva y María del Carmen Ortega Navas han coordinado un excelente equipo de ocho personas, ellos incluidos, para indagar en qué consiste “ser mayor” y averiguar “las dificultades sociales que conlleva el envejecimiento para, desde una perspectiva educativa, presentar diferentes aportaciones”. La pretensión de este volumen, escrito por profesores universitarios e investigadores, es llevar a la consideración del lector el envejecimiento como un proceso evolutivo que no disgregue la sociedad y fomente una vida lo más plena posible de las personas mayores.
El primero de los cinco capítulos que arman este volumen está a cargo de Ángel De-Juanas Oliva y Álvaro Muelas Plaza. Su título, El aprendizaje de las personas adultas y mayores en la sociedad del conocimiento, sitúa al adulto que aprende en el marco de una sociedad cada vez más compleja y marcada por el desarrollo de las nuevas tecnologías. Tras fijar conceptos, ambos autores presentan una interesante perspectiva histórica de la educación de adultos. Cómo aprenden los mayores y qué deben saber los educadores son cuestiones que cierran esta visión panorámica.
Intervención y desarrollo integral en personas adultas y mayores: sus derechos humanos fundamentales es el revelador título que Isabel Ortega Sánchez ha puesto a una contribución que comienza por tratar un aspecto clave de la madurez: la jubilación. Más adelante se ocupa del deterioro que acompaña al envejecimiento. Unas páginas que llevan al lector a la excelente obra del nobel Santiago Ramón y Cajal (1939), El mundo visto a los ochenta años, y que finalizan con recomendaciones para un envejecimiento saludable.
María del Carmen Ortega Navas y Javier Páez Gallego, con su Calidad de vida en personas mayores, indagan qué se entiende por calidad y bienestar de vida en una población envejecida. En su análisis de los modelos evolutivos de la vejez se detienen, con acierto, en el modelo de Erikson. Cierran su intervención denunciando el “viejismo” como percepción negativa de la vejez, extendida, a veces, incluso entre las personas dedicadas profesionalmente al cuidado de los ancianos.
Envejecimiento activo y saludable: desafíos, estilos de vida y medidas preventivas es la contribución de María Rosario Limón Mendizabal y María del Carmen Ortega Navas. Su eje central es el concepto envejecimiento activo (EA), acuñado en la última década del siglo pasado con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sus tres pilares básicos son: “participación, salud y seguridad, si bien la formación en esta etapa de la vida constituye también un pilar básico para éste”.
Se cierra este volumen con un capítulo, el quinto, escrito por Ana Eva Rodríguez Bravo y María José Flores Tena cuyo título, Cómo intervenir con personas mayores, indica con claridad su contenido. Para ambas autoras, en un proyecto de intervención se hace necesario que el envejecimiento activo se combine con los derechos inherentes a las personas de edad. Desde este presupuesto presentan el diseño de un proyecto de intervención que “implicará la reflexión detenida de los objetivos a plantear, el cómo alcanzarlos y hacer un uso eficiente de los medios y recursos de los que se dispone”.
Bien articulado, riguroso, lúcido e instructivo, este libro rebasa el ámbito académico. Indicado para todos aquellos interesados en analizar la sociedad más longeva de la historia y preparar soluciones para mejorar nuestra vida en un futuro no tan lejano.
