Mariana trabaja en una panadería y escribe para afuera. Frases inspiradoras, escribe, en el pizarrón que el comercio saca a la vereda. Gracias a su constancia ese dispositivo publicitario ofrece todos los días, en lugar de bizcochos y tartas, oportunidades de llegar a la conclusión de que la vida es bella.
Escribe: Fabio Guerra Correa. Setiembre – Octubre 2019.
Adquirí la costumbre de pasar a leer el pizarrón. Y supe que Mariana se llama Mariana la tarde que entré al comercio a preguntar quién lo escribía, y ella dijo: “Yo”. “¿Los patrones aceptaron sin patalear tu iniciativa?”, pregunté.
“Mi patrón ya escribe frases en las bolsas de papel que entregamos, y me autorizó a probar. Terminaron de convencerlo los clientes, son muchos los que me dan para adelante con esto, y uno hasta me trajo una frase de regalo”, comentó Mariana esa tarde, mientras embolsaba cruasáns rellenos.
Tiene 34 años y tres hijos, David, Agustina y Gennaro. Cursó primaria en el colegio Sagrada Familia; al liceo no lo terminó un poco porque la adolescencia la distrajo y otro poco por falta de estímulos del entorno. Lo que sí tiene entera es la afición a la lectura. Lee variado, aunque prefiere la historia. Y ya se sabe, quien lee, tarde o temprano, escribe.
“Si te da paz, te está dando todo”, dice otra oración escrita por Mariana. La mañana que la leí, el sol vestía la plaza que hay frente a la panadería. Es una plaza con árboles generosos. Y una fuente sin agua, cuyo ojo mira al cielo esperando el maná.
“Para los que saben esperar siempre hay una maravillosa llegada; las cosas buenas tienen el paso lento”, dijo otra sugerencia que Mariana estampó en el pizarrón.
Elogio de la lentitud, en un mundo apurado. Incluso en este mundo chico de San José, siempre hay alguien dispuesto a manotear primero el producto que amagaste sacar de la góndola.
Aunque sea la hora 13.30 y en toda la extensión de la estantería, y del supermercado, no haya un alma.
¿Y qué persona que anda en vehículo no ha sido desmelenada, o “descascada”, por el bocinazo de quien no soporta cinco segundos de detención?
A las puertas de las elecciones nacionales, Mariana sostiene a diario un compromiso político con la comunidad. La novena acepción de la palabra política en el Diccionario de la Real Academia, es esta: “Actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto, o de cualquier otro modo”.
Cosa de más asunto público que el empoderamiento del espíritu, no tengo vista.
